martes, 5 de julio de 2011

Entre periodismo y publicidad

Las siguientes líneas pertenecen a un extenso y algo denso trabajo universitario (Maestría Comunicación Digital - Universidad Pontificia Bolivariana). Sin embargo, significan un profundo análisis en grupo (con @Pedagogovirtual y @Paulavelezcasti) sobre la ética, vinculada a mis dos pasiones profesionales: publicidad y periodismo. Sólo comparto las primeras ideas.


“La publicidad en un periódico te da más conocimiento sobre lo que está sucediendo que las noticias mismas…”, al pensar en abrir un nuevo medio de comunicación en la Web, esta frase del clérigo estadounidense Henry Ward Beecher, aunque bastante radical y debatible, en esencia creo que tiene mucho sentido a la hora de ejercer la ética desde cualquier medio que se emita un mensaje.

Ya desde la época de los años 50, el economista Arthur Cecil Pigou afirmó que la publicidad cumplía en la sociedad un papel fuertemente informativo.

“Si no fuera así muchos artículos útiles, tales como maquinaria nueva o servicios eficientes como los seguros de vida, podrían no llegar a ser conocidos por los compradores potenciales que realmente los necesitan”, enfatizó Pigou.

Por otro lado, al revisar los momentos antiglobalización, la comunicación de tipo comercial tiene una función más profunda: es señalada como la encargada de imponer estilos de vida que posicionan necesidades artificiales con pautas de consumo no sostenibles. Lo interesante es que este tipo de comunicación está revelando notables esfuerzos éticos, enfocados en la autorregulación.

En este sentido, el ejercicio periodístico no puede desconocer la comunicación publicitaria y sus avances sobre prácticas responsables para vincularla a sus acciones diarias e influir positivamente en la construcción social.
Al visualizar mensajes que revelan la información como un espectáculo, sin generar valores sociales, como la solidaridad, seguramente piezas publicitarias ocupan los primeros pensamientos. Ahora, al hacer el ejercicio con el último noticiero local visto, ¿la percepción cambia? Es muy probable que no.

Así como lo señaló Konrad Lorenz dentro de los 8 pecados mortales de la humanidad es cada vez es más evidente cómo desaparecen las emociones y afectos a la hora de enviar un mensaje.

Para Hugo Aznar, un fenómeno emergente de la comunicación publicitaria es utilizar el dolor y el sufrimiento humano para atraer y transmitir un determinado mensaje, si ojeamos los titulares e imágenes de los periódicos más importantes del mundo podemos ver que la dinámica “amarillista” se mantiene. Pero, ¿será poco ético atraer?

La respuesta es negativa, lo que debe modificarse es la forma de informar. Volviendo al análisis de Aznar, él se enfoca en la publicidad institucional, la que usualmente apela al dolor como una especie de lección para generar un bien común y concluye que no es aceptable porque no se emite un mensaje ético para las personas que viven el dolor representado.

De hecho, desde varias décadas atrás el entorno publicitario ha desarrollado varias teorías para nivelar una frecuencia efectiva del mensaje y así equilibrar los propósitos noticiosos y educativos: “repetir suficientemente, interesar sin vencer al público y sin imponerse.”

¿Entonces al ver las imágenes y los videos que circulan en la Web para sustentar una noticia argumentarán mejor la veracidad de la información emitida y movilizarán hacia una solución?

Evidentemente no, como lo indicó Mónica González del Centro de Investigación e Información Periodística (Ciper) en Chile: “lo paradójico es que, a pesar de estar supuestamente sintonizados con los temas relevantes para la ciudadanía, los proyectos de periodismo de investigación muchas veces se encuentran con indiferencia y poco eco”.

No obstante, en plena construcción de la Sociedad de la Información aparece un naciente ecosistema bastante diverso que ha demostrado gestar movimientos sociales sobre temas ambientales y políticos.

Las redes sociales, han evidenciado el control de los ciudadanos para ser escuchados y ser parte activa de los mensajes emitidos por los medios y las piezas publicitarias: ahora se puede hablar de una democratización tanto de la información como de las marcas, como lo denominó Rosental Calmon Alves, director del Centro Knight para el Periodismo en las Américas.

Es interesante ver cómo la audiencia es quien establece los parámetros para demostrar su empatía o no hacia un mensaje; ahora es más evidente conocer lo que el público filtra y en ese sentido ofrecer la información de tal forma que sea aceptada, pero intentando ir más allá de la simple complacencia.

Bastará mirar Facebook o Twitter para comprender y conocer los intereses y gustos de una audiencia y superar las malas decisiones referenciadas por Francisco J. Pérez-Latre basadas exclusivamente el datos cuantitativos.

En definitiva los medios de comunicación y el mensaje publicitario sólo tienen dos vías a la hora de emitir mensajes: ayudan al crecimiento de las personas y fortalecen con la práctica los términos: bondad y verdad o se posicionan como fuerzas destructivas en conflicto con el bienestar humano.



Referecias ciber y bibliográficas:
- Sánchez Cano, J. (1966). La publicidad como democratización del lujo. Revista española de la opinión pública.
-Pérez-Latre, F. (2011). Publicidad con conciencia. La publicidad y los medios.
- García Posada, J. Lo humano de la formación ética.
- Aznar, H. (2010). Cuestiones morales en torno al uso del dolor en la publicidad. Extraído de http://ow.ly/5xdqH el 10 de junio de 2011.
- Pérez-Latre, F. (2011). Debate sobre la frecuencia y la repetición. La publicidad y los medios. 69.
- Franco, G. El impacto de las tecnologías digitales en el periodismo y la democracia en América Latina y el Caribe. Extraído de http://ow.ly/5gvMe el 11 de junio de 2011.
- Pérez-Latre, F. (2011). Carencias de las variables cualitativas. La publicidad y los medios. 69.
- Franco, G. El impacto de las tecnologías digitales en el periodismo y la democracia en América Latina y el Caribe. Extraído de http://ow.ly/5gvMe el 11 de junio de 2011.
- Documentos Vaticanos Pontificio Consejo para las Comunicaciones Sociales. (1997). Ética en la Publicidad. [11] Pérez-Latre, F.





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